El poder del agua
Las aguas mineromedicinales del Balneario, brotan del manantial de Tiberio a 53ºC y están especialmente indicadas en muchos tratamientos, ejerciendo un efecto terapéutico por sus características físico químicas, térmicas y de composición mineral, tanto en su ingestión por vía oral como aplicando las técnicas hidrotermales adecuadas a cada persona. Este manantial abastece todas las instalaciones del Resort. Fue descubierto por los romanos y en la actualidad todavía quedan vestigios de su presencia.
Las aguas del Balneario de Panticosa se caracterizan por ser hipertermales, emergiendo de la tierra a una temperatura de 53º C, es por ello una de las aguas más termales de nuestra Península y de Europa. Son muy alcalinas y blandas, fluoradas, sulfuradas, bicarbonatadas sódicas y oligometálicas. Por sus características, presentan acciones analgésicas y son muy beneficiosas para el tratamiento de enfermedades óseas, de piel, reumáticas, cuadros de estrés y problemas asmáticos.
El agua del Balneario de Panticosa contribuye al embellecimiento de la piel, a la descamación y a la regeneración de la piel por la riqueza en azufre, que interviene en la síntesis de las membranas celulares.
El Agua como elemento de Vida y Salud.
El agua se puede utilizar, según las distintas técnicas, para potenciar las defensas del aparato respiratorio, debido a su acción antiséptica. Tiene acción descontracturante y relajante (en deportistas). En el tratamiento complementario de la obesidad y celulitis (Hamman) junto a medidas dietéticas. Efectos sedantes, antiestrés y circulatorios (baños de burbujas) según el tamaño de la burbuja. El agua del Balneario de Panticosa, se ha venido utilizando en la industria cosmética para la elaboración de cremas de farmacia, siendo ampliamente apreciadas por sus propiedades beneficiosas.
Cuando el contenido de agua es el adecuado, nuestra piel será elástica y lisa, y nuestros ojos brillarán; además el funcionamiento de nuestro cuerpo será óptimo.
La Salud camina de la mano de la Belleza. Una belleza sana y natural empieza en el interior. Si el interior de nuestro cuerpo está limpio, nuestra piel será bella, porque ya no tendrá que eliminar desechos. El estado de la piel refleja nuestro interior.